Desconfianza

Estamos inmersos en una época en que la desconfianza generalizada en las instituciones afecta al funcionamiento de la sociedad. Una parte de la responsabilidad de este descrédito fue causado por los múltiples casos de corrupción protagonizados por los líderes de las organizaciones políticas, que en lugar de ser un ejemplo en los cuales pudiera fijarse la sociedad, la deshonestidad fue su bandera. Rapiñaron los fondos públicos, los fondos de todos, en beneficio de sus organizaciones y en el suyo propio. Dilapidaron ingentes cantidades de dinero que sirvió para realizar tan faraónicas como inútiles construcciones con las que llenar  los buches de obscenas arpías.

La creencia de que existe una corrupción generalizada no ayuda para mantener un comportamiento ético con los deberes para con la comunidad en la que vives (pagar impuestos, obediencia a las leyes, asunción de deberes…) Esta desconfianza no nace solo de los ejemplos que salen a la luz (de ahí la importancia de tener unos medios de comunicación libres), sino también porque dichos delitos queden impunes, disueltos en un montón de ardides legales, o peor aún,  absueltos por algún juez que no merezca ese apelativo.

Para intentar aliviar esta tendencia y generar confianza, se crean instituciones para velar por el funcionamiento ético de las organizaciones que tienen que tomar las decisiones sobre el funcionamiento de la sociedad. Pero estas instituciones dedicadas a tan crucial cometido deben de ser independientes y auto chequearse continuamente para evitar caer en las mismas prácticas que quieren combatir.

¿Llegaremos alguna vez como especie a ese grado de evolución necesario para tomar conciencia de que ese tipo de actitudes nos aleja del camino de la construcción de la civilización humana y así llegar a asumir nuestro grado de responsabilidad en la sociedad para evitar acercarnos cada vez más a la barbarie?

2 comentarios sobre “Desconfianza

  1. Lamentablemente la corrupción ha venido para quedarse. Cada vez son más lo casos sonados que hablan de cientos de millones defraudados y los culpables pagan con pocos años de cárcel. Entonces cunde el desaliento y ya no creemos en los políticos de turno, Así estamos ahora. Haces un reflexión de una realidad que nos golpea muchas veces. Es un placer leerte.

    Le gusta a 1 persona

  2. Prefiero pensar que siempre ha estado, y que ahora gracias a multitud de factores, se están destapando un número importantes de casos como punto de arranque para la erradicación del problema…Gracias por tu amable comentario, un abrazo

    Me gusta

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s